El coronavirus ha llegado al planeta tierra como un huracán que está transformando la vida de todos los seres que viven en él. Hasta ahora, eran muchas las películas que se habían realizado hablando de un virus que afectaba de forma desmedida a las personas, como «Contagio», de Steven Soderbergh; «Tren a Busan», de Yeon Sang-ho; o «Virus»,de Kim Sung-su, pero nunca nadie imaginó que en el siglo XXI fuéramos a vivir una pandemia de estas características.
Es obvio que nos equivocábamos, y la naturaleza lleva semanas demostrándonoslo. Desde que comenzó la propagación de esta enfermdad, son muchas las imágenes que han impactado a la sociedad día tras día. Ausencia de coches, número reducido de viandantes por la vía pública y animales salvajes paseando por el centro de las urbes como si del hecho más cotidiano se tratase son algunos de los efectos que ha provocado el COVID-19. Con el fin de mostraros una pequeña parte de estas consecuencias, a lo largo de este artículo mostraremos imágenes de ciudades desiertas por el coronavirus.
Imágenes de ciudades desiertas por el coronavirus
El planeta entero se ha visto afectado por el coronavirus. Incluso las ciudades más grandes están siendo testigo de cómo está desapareciendo esa vida, ese movimiento y ese sonido que se concentraba en sus calles día a día. A continuación, con el fin de que conozcas este tipo de hechos, vamos a mostrarte imágenes de ciudades desiertas por el coronavirus.
Madrid

Impresiona ver el Paseo de la Castellana de Madrid vacío. Se trata de una ciudad en la que a veces parece no haber espacio suficiente para acoger a todas las personas que hacen vida en ella. Ahora, el coronavirus ha transformado su rutina en silencio, en calma, incluso en miedo.
París

París, una de las más turísticas del planeta, también se siente sola. Sus monumentos han dejado de ser el foco de cientos de cámaras y los turistas han dejado de crear ese ambiente al que está acostumbrada la ciudad del amor.
Valladolid

Valladolid también está siendo testigo del silencio. El número de coches es limitado, las personas pasean en soledad y en su justa medida, y los animales que residen en el corazón de la localidad, el Campo Grande, como los pavos reales, están decidiendo conocer las calles de la ciudad bañada por el Pisuerga.
Roma

Creíamos que la Fontana di Trevi de Roma jamás conseguiría descansar una sola noche en soledad. Creíamos también que nunca se apagaría el sonido de las monedas cayendo en sus aguas. Pero a veces, suceden cosas que acaban con toda rutina a la que estábamos acostumbrados.
Venecia

El coronavirus está siendo una pandemia terrorífica para los seres humanos. Ahora, el parón de su actividad diaria está provocando situaciones que no se desarrollaban desde hace años. Venecia presume estos días de canales más limpios y, por lo tanto, de seres más activos que nunca, como es el caso de los peces que viven en sus aguas.
Wuhan

Wuhan, epicentro del coronavirus, se convirtió en una ciudad fantasma tras estar brutalmente afectada por el COVID-19. La ciudadanía, durante semanas, tuvo prohibido salir a la calle, por lo que el silenció gobernó en ellas durante dos meses.
Salamanca

Nunca la Plaza Mayor de Salamanca se había visto así. Turistas y residentes pasean diariamente por esta zona que sirve como lugar de reunión, para tomar el sol o para disfrutar de una deliciosa tapa o de una bebida refrescante en algunas de sus cafeterías. El coronavirus ha frenado prácticamente la mayoría de actividades que antes se desarrollaba en el centro de esta ciudad única.
Londres

Londres ha tardado más tiempo en ver sus calles vacías. Pero, finalmente, sus ciudadanos también se han visto afectados por el confinamiento. De este modo, en aquellos rincones por los que jamás se asomaba la calma, esta última se ha instalado con el fin de luchar contra la pandemia del coronavirus.
Buenos Aires

Sudamérica también ha sufrido esta pandemia. Una de las fotos más destacadas ha sido una en la que es protagonista Buenos Aires. Es una ciudad de casi tres millones de habitantes que se ha quedado vacía por la cuarentena.
Río de Janeiro

Los edificios de Río de Janeiro ya no son testigos de la rutina de los ciudadanos de esta preciosa ciudad de Brasil. Se pueden ver algunos coches, algunas personas comprando, pero nada que ver con el movimiento que tenía lugar antes de que comenzara el confinamiento.
Miami

¿Quién iba a pensar que las preciosas playas de Miami dejarían de recibir la visita de cientos de personas dispuestas a disfrutar del sol y de las aguas del mar? Las pandemias no entienden de zonas geográficas ni de clases, tal y como demuestra esta imagen.