El Camino Primitivo de Santiago es el más antiguo, está poco masificado y sigue los pasos del primer peregrino. También se le conoce como Camiño de Ovedo o Camino del Norte-Interior y une Oviedo, que es el punto de partida, con Santiago de Compostela. Tiene un total de 313 kilómetros repartidos en 14 etapas, por lo que se necesitan, como mínimo, dos semanas para completarlo y disfrutar de él.
El Camino Primitivo de Santiago
Etapa 1: Oviedo – San Juan de Villapañada (27 km)
La etapa empieza en Oviedo, concretamente en la catedral de San Salvador. Recomendamos hacer una parada en la iglesia prerrománica San Miguel de Lillo, que está en el monte Naranco. Después hay que dirigirse hacia San Lázaro de Paniceres, lugar de un antiguo lazareto destinado al cuidado de leprosos u otras enfermedades infecciosas.
Se pasa por la Bolguina y el Escamplero para llegar a las termas de Santa Eulalia de Valduno, que es uno de los tramos más bonitos de esta primera etapa. Posteriormente, hay que dirigirse a Peñaflor, después de cruzar el puente que lleva el mismo nombre, y pasar por Grado. De aquí destacamos la iglesia de Santa María de Grado, el palacete de la familia Martínez y el palacio de Indalecio Coruejo. La siguiente parada es ya San Juan de Villapañada.
Etapa 2: San Juan de Villapañada – Salas (18,2 km)
Se deja atrás San Juan de Villapañada, se pasa por la Reguera y se sube al santuario de Nuestra Señora del Fresno, un templo del siglo XVI. Después de esta visita, hay que dirigirse hacia San Marcelo, una localidad del concejo de Salas. Se pasa también por Doriga, donde puede visitarse la iglesia de Santa Eulalia de Doriga y el palacio de Doriga; y se cruza el río Narcea para acceder a Cornellana, donde puede visitarse el monasterio de San Salvador de Cornellana. Después hay que pasar Sobrerriba, Llamas, Quintana, Casazorrina y Mallecín para llegar a Salas.

Etapa 3: Salas – Tineo (19,8 km)
Recomendamos visitar el palacio de Valdés Salas, declarado Bien de Interés Cultural. Después hay que seguir el curso del río Nonaya, cruzar los puentes de Borra y Carcabón, para llegar a la N-634, autovía que lleva a Porciles. Posteriormente, se puede visitar la parroquia de Bodenaya y la iglesia de Santa María antes de llegar a La Espina, una población muy ligada al Camino desde hace siglos. Más adelante está La Pereda y la capilla del Santo Cristo de los Afligidos. Es necesario pasar por El Pedregal, la parroquia tinetense de Santa Eulalia y el Campo de San Roque antes de llegar a Tineo.
Etapa 4: Tineo – Pola de Allande (26,4 km)
Hay que salir de Tineo. El camino lleva hasta el regueiro de Robleu y, después, hasta el mirador de Letizia, desde donde se tienen unas vistas magníficas de los alrededores. Hay que aproximarse al collado de La Guardia, bordear el pico de Puliares e ir hacia Piedratecha por la AS-350. Antes de llegar a Villaluz se puede coger un pequeño desvío para visitar el monasterio de Santa María La Real de Obona, que se construyó en el siglo XII.
También se pasa por Campiello, Borres, La Mortera y Colinas de Arriba, se alcanza la cima de Lavadoira y, desde aquí, se coge la carretera para entrar en Allande por un camino que pasa por Ferroy. Después de cruzar esta última población, se llega a las puertas de Pola de Allande. Una vez en Pola de Allande se puede visitar el palacio de Cienfuegos y la iglesia de San Andrés.
Etapa 5: Pola de Allande – La Mesa (21,6 km)
Esta etapa es la más dura del Camino Primitivo de Santiago por sus 600 metros de desnivel. Tras abandonar Pola de Allande, hay que coger la AS-14 hasta El Mazo. Es un poco más adelante, justo cuando se cambia el asfalto por una senda que busca el río Nisón, cuando empieza la parte más dura. Hay que pasar El Colobreu y dirigirse hacia La Reigada, un pueblo que se encuentra a 400 metros de altitud y muy cerca del Túmulo de la Reigada. Hay que seguir hasta alcanzar la cima.
Ahora toca descender y acercarse a Montefurado, un pueblo que tiene un único habitante y una ermita preciosa que sirvió como hospital de peregrinos en la antigüedad. Hay que pasar por Texu de Lago, Sesto de la Fuente y Berducedo antes de llegar La Mesa, donde puede visitarse la iglesia de Santa María Magdalena.
Etapa 6: La Mesa – Grandas de Salime (15,2 km)
Esta es la etapa más corta del Camino Primitivo a Santiago. Hay que dirigirse a Buspol después de abandonar La Mesa. En este lugar pueden visitarse los restos de la antigua ermita de Santa Marina. Se pasa por un precioso bosque de castaños y por el mirador de la Boca de la Ballena. Siguiendo la AS-14, justo después del desvío a Pénjamo, se llega a Grandas de Salime. Aquí se puede visitar la capilla del Carmen de Grandas, la ermita de Pedreira, la colegiata de El Salvador y los túneles romanos de Penafurada.
Etapa 7: Grandas de Salime – A Fonsagrada (25,2 km)
Se abandona Grandas de Salime, se pasa por la capilla del Carmen y se sigue hasta Cereixeira. La siguiente parada es Malneira y, ya después, Castro. En este pequeño pueblo se encuentra el yacimiento de Chao Samartín, un recinto fortificado del siglo IX a.C.
Antes de llegar a Gestoselo, que es la siguiente parada, se puede visitar la capilla de San Lázaro. Posteriormente, se va hacia Peñafonte, punto limítrofe con Galicia. Recomendamos hacer una breve parada para visitar la iglesia de Santa María Magdalena antes de seguir hacia Bustelo del Camino. Antes de llegar a Fonsagrada se pasa por Venta do Acebo, Cabreira, Fonfría, Barbeitos, Silvela y Paradanova.
En Fonsagrada creemos que es indispensable visitar la iglesia de Santa María de Lamas de Moreira, la iglesia de San Andrés de Logares, los hórreos de Lamas de Moreira y la capilla de San José.
Etapa 8: A Fonsagrada – O Cádavo (24,3 km)
Después de pasar la noche en A Fonsagrada, hay que dirigirse hacia la aldea de Vilardongo. Después hay que ir hacia el Hospital de Montouto, un centro de atención que se fundó en el siglo XIV para los peregrinos que llegaban de Asturias .

En este mismo lugar pueden observarse las «mámoas», que son piedras milenarias que han sobrevivido al paso de los años honrando a los muertos que fueron enterrados allí. Después de varios kilómetros, se llega a la parroquia de Paradavella, lugar perfecto para recuperar fuerzas. Se sigue caminando hasta A Calzada, para, después, dirigirse hacia A Degolada y O Couto.
Antes de llegar a O Cádavo, hay que ir hasta el puerto de montaña de A Fontaneira, que es el tramo más complicado de la etapa por su desnivel. También hay que pasar por el Campo da Matanza, en el concello de Baleira. Una vez en O Cádavo, recomendamos visitar A Fraga da Marronda.
Etapa 9: O Cádavo – Lugo (29,5 km)
Cuando se deje O Cádavo, hay que dirigirse a la aldea de Pradeda, pasar por la ermita de los Remedios e ir dirección el Alto de la Vaqueriza. Antes de llegar a la localidad de Vilabade, entre caminos forestales, se encuentra la ermita del Carmen.
Hay que coger el camino que lleva directamente a Castroverde, que tiene una preciosa catedral. Después toca cruzar algunas pequeñas aldeas, como Moreira de San Paio, Vilar, Pallota, Santa María de Gondar, Cantera y Bascuas. Posteriormente, se llega a Carballido y ya después se llega a la tan deseada Lugo, donde se alza la catedral de Santa María y donde se encuentra el bonito parque Rosalía de Castro.
Etapa 10: Lugo – San Romao (19,6 km)
Toca abandonar Lugo, cruzar el puente romano y seguir el río. Se pasa por calles y carreteras residenciales que llevan al peregrino a aldeas o zonas salpicadas de casas particulares muy típicas de Galicia. La localidad más grande es San Vicente de Burgo, punto perfecto para coger fuerzas y conseguir algunas provisiones.
Hay que seguir el camino y hay que seguir cruzando aldeas y zonas residenciales hasta llegar a San Pedro de Mera. Hay que pasar también San Pedro de Baixo y Taboeiro antes de llegar al pequeño pueblo de San Román de Retorta (San Romao).
Etapa 11: San Romao – Melide (28,3 km)
Después de abandonar San Romao, hay que poner rumbo a Ponte Ferreira pasando por Burgo de Negral, Villacarpide, O Pacio, la iglesia de Santa María y Palas de Rei. Después toca cruzar Carballal para llegar a Leboreira y, posteriormente, a la iglesia de San Xurxo de Augas Santas, donde hay un curioso cementerio.
Las siguientes paradas son Montecelo y Merlán, pasando por una iglesia románica que se levantó en honor a San Salvador. El camino lleva después hasta el Hospital de Seixas, en plena Serra do Careón. Vilouriz y Vilamor son las paradas previas a Melide, donde se puede visitar la capilla de San Roque, la iglesia Sancti Spiritus y la capilla del Carmen.
Camino francés
El Camino Primitivo a Santiago conecta ahora con el Camino francés, por lo que las etapas 12, 13 y 14 pertenecen, en realidad, a este último. La etapa 12 va de Melide a Arzúa y tiene un total de 14 km, la etapa 13 va de Arzúa a Pedrouzo y tiene 19,3 km y, finalmente, la última etapa, la 14, va de Pedrouzo a Santiago de Compostela y tiene 19,4 km.
De estas últimas etapas destacamos el Museo da Terra, de Melide; y la iglesia de Santa Eulalia de Arca, la ermita de San Paio y la ermita de San Andrés, de O Pedrouzo. Y, una vez en Santiago de Compostela, hay que disfrutar de su majestuosa catedral, que es la que indica el final del Camino. También recomendamos visitar el monasterio de San Martín Pinario, el Santo Domingo de Bonaval, el mercado de Abastos y el hostal de los Reyes Católicos.