Asturias es una comunidad autónoma que destaca tanto por sus bellos paisajes naturales como por su patrimonio cultural y gastronómico, y su capital le hace justicia. ¿Quieres descubrir todo lo que la bella ciudad de Oviedo tiene por ofrecer? ¡Sigue leyendo!
La Catedral de Oviedo
El impresionante complejo catedralicio de Oviedo es la pieza central espiritual y artística de la ciudad. A la entrada, sorprende la imponente torre gótica de cinco niveles y múltiples inspiraciones, terminada en 1587. En el interior, la nave central de la catedral, flanqueada por capillas menores, está dominada por un gran retablo mayor hispano-flamenco tallado en madera, terminado en 1517.
La esquina noroeste de la Capilla del Rey Casto, una capilla barroca a la que se accede desde el crucero norte de la catedral, alberga el Panteón Real, en el que se cree que se encuentran las tumbas de seis monarcas asturianos, incluido el propio Alfonso II.

La cámara de la catedral
Si bien la mayor parte de la estructura de la Catedral de Oviedo fue construida en estilo gótico y barroco entre los siglos XIII y XVIII, sus orígenes y su punto de mayor interés se encuentran en la Cámara Santa, una capilla prerrománica construida por Alfonso II para albergar reliquias sagradas (entre las que se dice que se encuentran, según se cuenta, una de las seis tinajas que habría utilizado Jesucristo para convertir el agua en vino en las bodas de Caná). Consagrada en 1998 como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, la capilla contiene varios símbolos clave del cristianismo español medieval.
El Monte Naranco
El Monte Naranco se encuentra a 3’5 kilómetros al noroeste del centro de Oviedo, y en él se puede disfrutar de auténticas joyas arquitectónicas e históricas mientras se disfruta de la naturaleza y de unas vistas espectaculares.
Santa María Naranco
En las laderas del Monte Naranco se encuentra este alto y estrecho palacio construido por Ramiro I. Además de ser uno de los monumentos más antiguos de España, es un exquisito ejemplo de la arquitectura prerrománica única de Asturias. Su construcción supone un avance en el arte asturiano ya que utiliza un novedoso elemento decorativo: el sogueado, motivo escultórico que imita la cuerda utilizada en sus columnas.

San Miguel de Lillo
Cerca de Santa María de Naranco se encuentra la Iglesia de San Miguel de Lillo, otra de las joyas de la arquitectura prerrománica de Asturias. Hoy en día no son más que los vestigios de lo que fue una espectacular iglesia en el s.XIX. Ésta era tres veces más grande que la actual, pero sufrió importantes daños en los siglos XIII y XIV de los que solo sobrevivieron su vestíbulo y parte de su triple nave. Destaca la exquisita celosía de piedra de las ventanas.
El Monumento al Sagrado Corazón de Jesús
Continuando el ascenso por el Monte Naranco se encuentra el Monumento al Sagrado Corazón de Jesús, una escultura de 81 metros de alto conocida popularmente como el «Corcovado de Oviedo» ya que recuerda a su homólogo brasileño, al tratarse también de una escultura de Jesucristo con los brazos abiertos situada sobre in monte. Además de la estatua, que es de por sí majestuosa, merece la pena visitarlo por las vistas.
Las plazas de Oviedo
Oviedo es una ciudad para recorrer caminando, y sus calles te invitan constantemente a perderte. Paseando por ellas, podrás llegar a alguna de sus numerosas plazas:
La Plaza de la Constitución
Rodeada de tiendas, cafés y ejemplos señoriales de la arquitectura del siglo XVII, esta hermosa plaza se encuentra cerca del corazón del centro histórico de Oviedo.
La Plaza de Trascorrales
Hacia el extremo oriental del centro histórico se encuentra esta plaza que destaca por su colección de estatuas de bronce, de la que hablaremos más adelante.

La Plaza Fontán
Esta colorida plaza rodeada de aceras porticadas y casas históricas decoradas por flores destaca por albergar el mercado del mismo nombre: el mercado de fontán. Por cierto ¿Sabía que «fontán» significa «charco» en bable?
El Mercado Fontán
Los orígenes de este suntuoso y alegre mercado de comida repleto de carnes, pescados, frutas y verduras se remontan a la década de 1520. Para probar los mejores productos, se recomienda llegar antes de las 2 de la tarde.
El Campo de San Francisco
El Campo de San Francisco es un parque urbano que constituye uno de los puntos verdes más importantes en el centro de la ciudad. Este parque de 90.000 metros que sobrevive desde el siglo XIII está situado donde antes se ubicaba un viejo monasterio, en cuyo lugar se encuentra la Junta General del Principado.
Ruta por las estatuas
Si por algo destaca la capital asturiana es por la enorme cantidad de estatuas que puedes encontrar a tu paso por ella. En el mismo Campo de San Francisco puedes encontrar alguna de las más famosas: la estatua de Mafalda y la de «La Torera», erigida en honor a Josefina Carril, que hacía fotos en el parque.
Por el casco urbano se reparten el resto de las estatuas: la de Woody Allen en la Calle Milicia; la de «El Diestro» en Calle Pelayo; o la de «la Gitana» y «la Guisandera» en la Calle Gascona (o calle de la sidra, donde encontrarás la mejor de la ciudad).

En la Plaza de la Catedral encontrarás la estatua de «La Regenta»; en la Plaza Trascorrales, «El Pescadero», «La Pescadera» y «La Lechera»; en la Plaza Porlier, «El Viajero»; en la Plaza de la Escandalera, los «Asturcones» -pequeños y rústicos caballos asturianos- y «La Maternidad»; y en el Teatro Campoamor, donde se entregan cada año los Premios Príncipe de Asturias, encontramos la estatua de la «Esperanza Caminando» y «Culis monumentalibus» (coloquialmente conocida como «El Culo»).
Museos de Oviedo
Si lo paseos por la ciudad te saben a poco y quieres ahondar en las raíces culturales y artísticas tanto de Asturias como de España, no dudes en visitar el Museo de Bellas Artes ni el Museo Arqueológico, ambos de gran calidad.