El cambio climático es una realidad que afecta todos los aspectos de nuestra vida, especialmente en ámbitos como el ocio, la alimentación, o los viajes en avión, que son los que más contribuyen al calentamiento global. Este impacto negativo en el medio ambiente se puede reducir si se evita la contaminación de los aviones cambiando los trayectos que realizamos en los mismos por viajes en tren. Esto es lo más relevante que cualquier persona a la que le guste viajar puede hacer para reducir su huella de CO2 y limitar su propio impacto en el medio ambiente.
Hace unos años, Eurostar encargó una investigación para evaluar el CO2 producido por pasajero en un viaje de tren subterráneo de Londres a París frente al emitido por un pasajero en un vuelo entre las mismas capitales. Esta investigación analizó, entre otros aspectos, las cargas reales de pasajeros, el consumo de energía y la forma en que se genera la electricidad de los trenes, así como las cargas y el consumo real de combustible de los aviones. La conclusión fue determinante: viajar en el tren subterráneo en lugar de volar a París reduce las emisiones de CO2 por pasajero en un 90%.
De hecho, un avión emite 285 gramos de CO2 por pasajero y kilómetro, mientras que el tren sólo emite 14 gramos. Según estas cantidades, entendemos que viajar en tren es, bajo criterios sostenibles, la solución que mejor evita la contaminación de los aviones cuando tenemos que elegir un medio de transporte tanto para viajes de ocio como de negocio.
Evita la contaminación de los aviones reservando más viajes en tren

Entre interminables controles del aeropuerto que duran horas -y en los que se utilizan grandes cantidades de plástico tanto en las bolsitas transparentes para transportar líquidos como las que se ofrecen a los pasajeros que deben quitarse los zapatos-, y el tiempo y costes añadidos de llegar y salir de aeropuertos alejados de las ciudades, subirse a un avión no es una opción sostenible para el medio ambiente.
Los viajes en tren, en cambio, pueden ser mucho más agradables y satisfactorios que la experiencia de viajar en avión, ya sean vuelos cortos o largos. En un mundo cada vez más globalizado, donde cada vuelo es una experiencia estresante y apenas satisfactoria, los trenes y los barcos se convierten en excelentes medios de transporte al mostrar mucho más sobre el paisaje y cultura de cada país.
Aunque pienses que no hay nada mejor como viajar en avión, las alternativas a volar son más fáciles y más prácticas de lo que piensas. Puedes planificar y reservar viajes en tren desde España a casi cualquier país de Europa con la gran cantidad de sitios web y páginas de reservas que hay por la red. Solo tienes que hacer una comparativa de cuál es la ruta y el precio que más te compensa en función del tiempo de viaje y país de destino. Además, existe la opción de combinar billetes entre varios países a muy buen precio gracias al Interrail Pass.
En lo que se refiere a los viajes de negocios, las rutas en tren pueden ser bastante productivas, ya que casi todos los trenes cuentan con espacio para trabajar y enchufes para conectar el cargador del portátil o del móvil. En los viajes de ocio, el tiempo compartido con las personas que te acompañan es tiempo de calidad que puede ser aprovechado para hablar u organizar la llegada al lugar de destino.
Teniendo en cuenta todas estas ventajas, tal vez descubras la experiencia interesante y gratificante de viajar en tren, sobre todo si al mismo tiempo evitas la contaminación producida por pasajero en cada viaje de avión.