Para muchos de quienes han tenido el placer de verla e incluso para quienes solo han soñado con ella, la Aurora Boreal es casi cosa de magia. Es como si, de repente, la noche se rompiera. No es una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno, pero es, sin duda, uno de los fenómenos naturales mas bellos e impresionantes que se pueden contemplar.
Lo que ves es como la oscuridad es atravesada por hermosas y extrañas formas de luz; formas imposibles y cambiantes, de colores brillantes. Por un rato el cielo se vuelve brillante y vibrante. Es hermoso, con esa clase de belleza parece magia y que solo la naturaleza es capaz de crear. Esa belleza que asusta a la vez que sorprende y engancha.
Qué es la Aurora Boreal
El núcleo de la esfera terrestre y el movimiento del mismo crean un campo magnético que rodea la tierra. Es como si unas lineas invisibles unieran el globo de norte a sur, partiendo de los polos.
Al mismo tiempo el sol esta emitiendo partículas de forma constante. Esta partículas conocidas como viento solar salen del Sol a una velocidad que puede alcanzar los mil kilómetros por segundo.
El campo magnético que rodea la tierra actúa para evitar el viento solar. Es como si se colocara algo en mitad de un rio. El agua seguiría fluyendo pero sin mover ni atravesar la piedra. Aunque el viento solar no llega a atravesar el campo magnético, su fuerza si consigue deformarlo a su paso. Esta deformidad hace que las partículas cargadas de energía que conforman en campo magnético entre en contacto con las partículas de las capas más bajas de la atmósfera. Al hacerlo, pierden la energía en una longitud de onda que se trasforma en las luz, los colores y las formas que vemos en el cielo.
Esta forma de perder la energía en forma de longitud de onda significa que no la pierde de forma brusca, sino que la pierde de mas a menos. Esa energía que van perdiendo las partículas recorren los hilos magnéticos invisibles que unen los polos es que están siendo deformados por el viento solar.
Qué es lo que vemos cuando vemos la Aurora Boreal
La primera vez que la ves, la primera vez que miras al cielo y te encuentras cara a cara con el poder de la Aurora Boreal, asusta. Sobrecoge tu corazón como solo la extraña belleza de lo inexplicable puede hacerlo. Porque aún siendo consciente de lo que es, científicamente hablando, una Aurora Boreal, asusta contemplar algo tan impresionante. Además de impredecible y hermoso. Asusta sentirse tan pequeño mientras la noche estalla en mil pedazos de luz de mil colores.
Pero sus colores hipnotizan, su magnificencia engancha y la sensación de estar contemplando un cuadro vivo de luces y colores en un lienzo negro, eleva la Aurora Boreal a la categoría de arte.
Donde ir para ver la Aurora Boreal
Buscando la Aurora Boreal debemos viajar al norte. Siempre en torno al Círculo Polar Ártico.
Un gran sitio es la costa suroeste de Groenlandia, puedes buscar en el mapa Kangerlussuaq. También el norte de Alaska, en las Fairbanks. o Yellowknife en ellos territorios del Noroeste de Canada. Son los mejores lugares si quieres hacerlo en el lejos de casa.
Si prefieres hacerlo en Europa, viaja al norte de los países nórdicos. Un buen sitio es el Cabo Norte en Noruega. En Finlandia, el Parque Nacional de Urho Kekkonen. Aurora Sky Station es el lugar en la Laponia sueca. Sin olvidarnos del Parque Nacional Pingvellir en la costa norte de Islandia.
Para los más valientes, la enorme y fría Siberia. Si quieres tener más posibilidades de verla, viaja al norte en invierno. La Aurora Boreal es más frecuente entre finales de otoño y principios de primavera.
Pero si andas buscando aventura con mayúsculas, quizá sueñes con la Aurora Austral. La misteriosa gemela del Sur. Tan hermosa y poderosa como su hermana del norte, pero mucho más esquiva y tímida. Escondida en la Antártida y el océano Antártico, la Aurora Austral espera por los más audaces, para iluminar su noche y convertir el cielo en olas de luz y color sin cadencia ni orden aparente.
Da igual si es La Aurora Boreal o Austral, ambas son obras impresionistas de brillantes pinceladas de colores sobre un lienzo nocturno. Ambas están creadas con toda la pasión y la energía de la madre naturaleza. Ambas están destinadas a ser vistas, disfrutadas, temidas y veneradas.
Por eso las Aurora es algo que tienes que ver, que tienes que sentir y que, desde luego, tienes que vivir una vez en la vida.