Viaje a la Alcarria explica la experiencia de un viajero que recorre las carreteras y pueblos de la Alcarria. Va de pueblo en pueblo y vive curiosos encuentros, numerosas anécdotas y conversaciones entrañables. El libro, que se publicó en 1948, fue escrito por este viajero, que no es otro que el nobel en literatura Camilo José Cela. Pues la ruta de la novela Viaje a la Alcarria es real y reproduce el itinerario que realizó el escritor.
La ruta de la novela Viaje a la Alcarria
Aunque Camilo José Cela hizo esta ruta caminando, aquellos que no dispongan de tanto tiempo pueden hacerla en coche.
Guadalajara, punto de inicio

El punto de partida es la ciudad de Guadalajara, lugar en el que se encuentran las ruinas del Alcázar Real, los torreones de Álvar Fánez y del Alamín y el puente sobre el río Henares, que aún conserva toda su esencia andalusí.
Durante esta etapa inicial hay que visitar también la Concatedral de Santa María la Mayor. Es de estilo gótico y fue construida entre los siglos XIII-XIV, aunque tuvo que ser reformada en el siglo XVII. También son destacables dos palacios, el Palacio del Infantado y el Palacio de Mendoza, este último considerado el primer edificio español renacentista.
Torija

Torija es un imprescindible dentro de la ruta a pesar de su pequeño tamaño. Esta localidad está presidida por un histórico castillo medieval que actualmente alberga un museo dedicado al libro Viaje a la Alcarria. También acoge el Centro de Interpretación Turística de la provincia de Guadalajara. Este precioso castillo está justo enfrente del ayuntamiento, junto a la Plaza de la Villa.
Brihuega

Brihuega, o jardín de la Alcarria, posee un conjunto histórico-artístico que destaca por sus casonas renacentistas, su castillo, su muralla y sus portales medievales. Por todo esto fue declarado Conjunto Histórico Nacional.
A pesar de su pequeño tamaño, en Brihuega hay mucho por ver, como el Castillo de la Peña Bermeja y su puerta de Santa María de la Guía, la iglesia de Santa María de la Peña, la Real Fábrica de Paños y su jardín, sus fuentes y su lavadero y la Plaza del Coso, donde hay una antigua cárcel y un sistema de cuevas de origen árabe. En primavera, además, tiene lugar el florecimiento de la lavanda y los campos de Brihuega se visten de violeta.
Cifuentes y Trillo

Después de visitar Brihuega y dejando atrás Masegoso de Tajuña, se llega a Cifuentes. Su nombre se debe a la gran cantidad de fuentes y caños que hay en el pueblo. También posee una gran riqueza arquitectónica, siendo la Iglesia del Salvador del siglo XIII, la Plaza Mayor porticada y el castillo medieval visitas imprescindibles.
La siguiente parada será Trillo, donde pueden visitarse las ruinas románico-góticas del Monasterio de Santa María de Ovila. Aquí, además, el río Tajo y sus cascadas son las protagonistas.
Córcoles

Para llegar a Córcoles hay que seguir el curso del río Tajo a lo largo de los embalses de Entrepeñas y Buendía, también conocidos como el «mar de Castilla».
En Córcoles se puede visitar el Monasterio de Santa María de Monsalud, que pertenece a la orden del Císter y fue uno de los más antiguos y mejor conservados de la provincia de Guadalajara.
Pastrana

Después de visitar Córcoles y pasar por el municipio de Sacedón y por Tendilla, se llega al pueblo de Pastrana, que está situado sobre una ladera y entre barrancos. Fue declarado Conjunto Histórico Nacional gracias a sus calles empedradas de corte medieval, sus murallas, sus fachadas y sus fuentes.
Hay que visitar de forma obligatoria los alrededores de la Plaza de la Hora, que es donde se encuentra el gran Palacio Ducal y el mirador hacia el río Arlés.
Zorita de los Canes, final de la ruta

El municipio Zorita de los Canes está bañado por el río Tajo y está situado sobre una loma que permite ver la comarca a kilómetros a la redonda. Se recomienda visitar las ruinas de su castillo medieval, que sirvió de defensa durante el siglo XVI. También hay que visitar el Parque Arqueológico de Recópolis, antigua ciudad visigoda y, de hecho, la única que hubo en Europa. En su interior se pueden ver los restos de un palacio, una iglesia y viviendas.
Y es en Zorita de los Canes donde finaliza la ruta de la novela Viaje a la Alcarria. Aunque la mejor guía de viaje será sin duda la misma novela, la cual Camilo José Cela escribió con mucho mimo y detalle basándose en su propia experiencia, nos hemos atrevido a hacer un breve resumen del recorrido destacando los principales puntos de interés.
Es muy fácil encontrar alojamiento en los pueblos que componen la ruta. Así como también es muy sencillo encontrar restaurantes donde degustar platos típicos de la zona y reponer fuerzas.