Para muchas personas que visitan Nueva Zelanda, Australia, América del Norte o Europa durante un buen tiempo, una furgoneta camperizada es la forma preferida de moverse. Se puede ahorrar mucho dinero en alojamiento y ofrece la sensación estimulante de libertad total en la carretera.
Pero si eres nuevo a la hora de viajar en furgoneta camperizada o autocaravana, entonces puede ser difícil comenzar con tu primer viaje: la diversión se encuentra en el equilibrio entre las responsabilidades y las limitaciones. A continuación, te damos algunos consejos para viajar en furgoneta camperizada para que aproveches al máximo de esta experiencia.
Consejos para viajar en furgoneta camperizada
Alquila o Compra
Hay muchas compañías que te alquilarán una furgoneta camperizada a precios bastante razonables. Pero si vas a viajar durante un tiempo, entonces puede tener más sentido comprarte una propia, ya sea nueva o de segunda mano. En este caso, siempre es una buena idea que un mecánico revise la furgoneta antes de haber hecho el trámite, para asegurarte de que no estás comprando un vehículo en malas condiciones.
Apuesta por el minimalismo
A menos que conduzcas una de esas mega furgonetas camperizadas que se ve mucho en los EE. UU. – podrían ser llamadas casas móviles – tendrás una cantidad limitada de espacio disponible. Organizarte es esencial en este tipo de viajes: pon las cosas que más necesitas, como los abrelatas y los kits de lavado, a tu alcance, y trata de viajar con lo imprescindible.
Guarda bien los alimentos
Una de las inversiones más inteligentes que puedes hacer para viajar a largo plazo en furgoneta camperizada, es comprar algunos contenedores de plástico sellados. Mantendrán tu comida fresca y evitan que los insectos y el curioso ratón ocasional roben tus cereales de desayuno.
Compra todo en los supermercados todo, desde las bebidas hasta los envasados siempre que sea posible. Los precios de las estaciones de servicio pueden acabar con tu presupuesto muy rápidamente.
Utiliza campings
Muchos países permiten el campamento «salvaje», pero puede ser bueno reservar un campamento un par de días cada semana. De esa manera puedes tener el placer de ducharte en agua caliente, lavar la ropa y, lo que es más importante, conocer a otras personas. Mantenerte en contacto con otros viajeros en furgoneta camperizada o caravana por carretera, es excelente para obtener consejos sobre cómo sobrevivir y dónde ir a continuación.
No te preocupes demasiado por las cosas que suceden por la noche
Si nunca antes has acampado, puede ser que de vez en cuando te asustes por las cosas que pasan por la noche. No te preocupes, lo más probable es que no se trate de un convicto fugado o de un león de montaña al acecho. Posiblemente sea solo un palo que cae de un árbol sobre el techo de tu furgoneta, o un animal que hace su vida por las zonas cercanas.
No hagas caso a tu itinerario al pie de letra
La belleza de viajar ne furgoneta camperizada es que llevas tu cama contigo, por lo que eres totalmente libre de ir a donde quieras cuando quieras. Si encuentras un lugar que te guste, quédate un tiempo más. Si no lo haces, arranca y sigue adelante. Las vacaciones en furgoneta camperizada abren las puertas a la aventura.