España es un país de grandes ciudades, con una rica gastronomía, con un buen clima y unas buenas playas, por todo esto es uno de los destinos más escogidos para viajar y pasar las vacaciones. Pero también tiene pueblos recónditos con mucho encanto, algunos de ellos hasta desconocidos. Así que si buscas unas vacaciones o una escapada diferente, toma nota de los pueblos más escondidos de España.
Los pueblos más escondidos de España
Tienes a continuación una selección de los pueblos más escondidos de España, todos ellos con mucho encanto e ideales para una escapada.
1. Orbaneja del Castillo
Orbaneja del Castillo es un pueblo de Burgos que toca casi Cantabria y se considera uno de los más bonitos de la provincia.

Las fachadas de las casas aún conservan su esencia medieval, por lo que te aconsejamos que pasees por las calles, tan llenas de encanto, del casco antiguo y disfrutes de todos los detalles que esconden.
En lo más alto del pueblo nace un arroyo que lo cruza y desemboca en el río Ebro, pero por el camino el agua hace varios saltos y forma una cascada de unos 25 metros. Una auténtica maravilla de la naturaleza. Y esto no es todo, justo antes de llegar al río Ebro se formaron unas pozas que tienen un color azul turquesa precioso. De este lugar puedes hacer fotos increíbles, pero no podrás bañarte porque está prohibido. Una lástima.
2. San Martín de Trevejo
Junto a La Raya de Portugal, en plena Sierra de Gata y a los pies de la montaña de Jálama, se encuentra el pueblo de San Martín de Trevejo. Para acceder a él es necesario conducir por puertos de montaña hasta una altura de 1400 metros por encima del nivel del mar. La carretera está llena de curvas, pero vale mucho la pena.

Se podría decir que este pueblo ha estado casi desconectado del mundo desde hace siglos, de hecho los habitantes hablan una lengua propia, la fala, la cual también se habla en Elijas y Valverde de Fresno.
Recorrer su casco antiguo es algo obligado si visitas este pequeño pueblo, además por sus calles hay varios arroyos de agua y sus casas están todas construidas de madera y adobe. También podrás ver algunos palacios, como el del Comendador y el de Ojesco.
3. Cuevas del Agua
Cuevas del Agua es un pequeño pueblo situado a orillas del río Sella, en el municipio de Ribadesella, Asturias. Lo mejor es su entrada, La Cuevona, una cueva que sirve como acceso al pueblo, una auténtica obra arquitectónica construida por la naturaleza. Tiene aproximadamente 300 metros de largo, dispone de varios puntos de iluminación y, aunque te recomendamos que aparques el coche y la cruces andando para poder apreciarla mejor, está totalmente asfaltada, por lo que puedes conducir sin problemas a través de ella.

Cuando llegues al pueblo verás que las casas conservan su construcción original y que tienen una particularidad, muchas de ellas poseen un edificio auxiliar llamado hórreo, que sirve para guardar el maíz.
Aquí podrás hacer la Ruta de los Molinos, que nace en este mismo pueblo y te llevará a través de diferentes molinos de agua.
4. Mirambel
Mirambel, rodeado de murallas, es uno de los pueblos más bonitos que puedes visitar en Teruel. Con poco más de 100 habitantes censados, posee uno de los cascos antiguos más importantes de Aragón. Conserva totalmente toda su muralla, construida por templarios, y varias construcciones medievales, como el Convento de las Monjas Agustinas o la iglesia de la Santa Margarita, un castillo, una casa consistorial, palacios renacentistas y casas señoriales típicas aragonesas con arcos y volados de madera.

En el año 1995, el director Ken Loach decidió mostrar sus bellas calles en la película Tierra y libertad, algo que sus habitantes agradecieron poniéndole su nombre a un paseo. Además, fue en Mirambel donde Pío Baroja encontró la inspiración para escribir en 1931 su obra La venta de Mirambel.
5. Bandujo
Llegar a Bandujo, en el concejo asturiano de Proaza, hasta hace unos pocos años, era extremadamente complicado porque no había una buena carretera de acceso. Esto, sumado a que el pueblo tenía unos 40 habitantes, ha hecho que conservara todo su encanto. Aquí podrás ver una arquitectura tradicional muy bien conservada y tendrás unas vistas de lo más impresionantes.

El pueblo data del siglo VII y conserva uno de los mejores conjuntos medievales de la zona, con un palacio, la iglesia de Santa María que data del siglo X y una torre de planta circular del siglo XII.
Antes la única manera de acceder a este bello lugar era a través del Camino Medieval, un agradable recorrido de aproximadamente 3 kilómetros que debía hacerse a pie.
6. Patones de Arriba
Patones de Arriba se encuentra a unos 70 kilómetros de Madrid. Este pueblo estuvo abandonado durante años, por eso se ha conservado tan bien. Actualmente es un pueblo que se utiliza, sobre todo, para pasar un fin de semana o unas pequeñas vacaciones.

Está a 800 metros sobre el nivel del mar, destacamos sus calles empinadas y sus casas de pizarra negra que datan del año 1500. Si pasas por Patones de Arriba, no te olvides visitar la antigua iglesia de San José, que es donde se ubica ahora mismo la oficina de turismo. Muy cerca se encuentra la Cueva del Reguerillo y hay varias rutas de senderismo interesantes.
7. Masca
Ahora toca desplazarnos hasta la bonita isla de Tenerife, que es donde se encuentra el bonito pueblo de Masca, rodeado de montañas y en el risco del Parque Rural del Teno.

Podemos decir que Masca se encuentra en uno de los puntos más remotos de la isla, con las olas rompiendo en su playa de origen volcánico, altas montañas y puestas de sol increíbles.
Sus casas son una muestra de arquitectura tradicional canaria, y aunque quedaron prácticamente destruidas hace unos años en un incendio, se reconstruyeron manteniendo su aspecto original.
8. Os de Civís
Para acceder a Os de Civís vas a tener que salir de España. Quizá esto te resulte extraño pero el único acceso a este pueblo del Pirineo de Lleida, que pertenece al municipio de Les Valls de Valira, es una carretera que parte de Andorra. Esta extraña combinación tiene una bonita recompensa, estar en uno de los pueblos más aislados de España a 2000 metros sobre el nivel del mar y disfrutar de un paisaje increíble. Como curiosidad, hasta los años ochenta no había electricidad ni teléfono en la zona.

Sus casas de piedra conservan su aspecto original y es agradable perderse entre sus calles, sobre todo en invierno, cuando todo está nevado.
9. Castellfullit de la Roca
Castellfullit de la Roca se encuentra en la comarca de la Garrocha, en la provincia catalana de Gerona y es otro de los pueblos más escondidos de España que vale la pena visitar. Parece un pueblo flotante construido sobre murallas porque está sobre un precipicio a 50 metros de altura.

Todas sus calles y casas son de origen medieval y están construidas con roca volcánica de la zona. La antigua iglesia de San Salvador es el lugar donde mueren todas las calles y donde hay un mirador que ofrece unas vistas increíbles de la zona.
Muy cerca se encuentra el Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrocha, una zona privilegiada de la península ibérica formada por conos volcánicos inactivos desde hace miles de años y que ha creado un paisaje único.
10. Puentedey
La madre naturaleza es la mejor arquitecta que existe, y el pueblo de Puentedey, en la provincia de Burgos, es una prueba de ello. Con un aspecto medieval muy bien conservado, el pueblo está construido sobre un arco de roca natural que forma uno de los puentes naturales más increíbles de España.

El puente, situado sobre el río Nela, es fruto de la erosión. En la antigüedad, sus habitantes estaban tan orgullosos del puente que decían que era obra de Dios. Por este motivo le llamaron el Puente de Dios.
Es un lugar tranquilo para disfrutar en familia o, simplemente, desconectar entre los atractivos del pueblo y sus alrededores. Del pueblo destacamos un palacio del siglo XV de estilo gótico y la iglesia románica de San Pelayo del siglo XI. Cerca hay un mirador que tiene unas vistas magníficas de la zona, también muy recomendable.
Estos son los pueblos más escondidos de España que vale la pena visitar si buscas tranquilidad, poco turista y desconexión. ¿Conocías alguno de estos pueblos? ¿Has visitado alguno de ellos? Está claro que no es un tipo de turismo para todos, pero te asegura tranquilidad.